Noticia extraída de: http://www.expansion.com/agencia/efe/2012/03/13/17055521.html
Nerja
(Málaga), 13 mar (EFE).- Investigadores de la Cueva de Nerja (Málaga) estudian el uso productos
químicos para erradicar el mal verde de las cuevas turísticas, un biodeterioro
causado por microorganismos que, gracias a la luz artificial, realizan la fotosíntesis
y se desarrollan sobre las rocas erosionándolas.
Yolanda
del Rosal, bióloga de la Cueva
de Nerja que participa en una investigación interdisciplinar de conservación de
esta cavidad, ha explicado a Efe que el mal verde es un biodeterioro muy llamativo,
ya que forma grandes manchas de este color sobre las paredes.
Del
Rosal ha señalado que afecta a todas las cuevas turísticas, porque existen
microalgas y microbacterias que entran por el aire y se adhieren al espeleotema
o depósitos minerales y, con la luz eléctrica, empiezan a hacer la fotosíntesis
y a desarrollarse.
La
investigación está dirigida, en primer lugar, a eliminar el mal verde de las
zonas en las que existe y, para ello, se están haciendo ensayos con productos
químicos y distintos geles para aplicar un proceso o protocolo que a largo
plazo, no genere más daño que el que ya realizan estos seres vivos sobre la
roca.
Del
Rosal ha afirmado que, una vez que las paredes de las cuevas estén limpias, el
siguiente paso es evitar que el mal verde vuelva a reproducirse y la única
forma de conseguirlo es modificar las condiciones de iluminación.
La
bióloga ha informado de que, en el caso de la Cueva de Nerja, se está apostando por luces de
ahorro energético y led, y por la prueba con diferentes tonalidades, entre las
que el color verde es el que ofrece mejores resultados.
"Los
causantes del mal verde no absorben la luz con esta tonalidad, la reflejan,
pero es un poco la pescadilla que se muerde la cola, porque la pared se ve
verde", ha precisado Del Rosal, que argumenta que lo que hay que tener en
cuenta en este caso es que "la luz verde no daña el espeleotema, los
microorganismos sí".
El
proyecto interdisciplinar de la
Cueva de Nerja, que comenzó en 2009, pretende establecer un
modelo de gestión para las cuevas visitables y sus resultados se emplearán para
diseñar estrategias de protección de las cavidades en relación con el número de
visitas que pueden asumir. EFE